Diario de América Latina |
El joven suizo que es hijo de una santafesina y vivió en nuestra ciudad, Sebastián Michellod, sigue recorriendo Latinoamérica y aquí aporta su relato a este info de O Sea.
|
|
|
Cuando nos contactamos con Sebastián, que por estos días está en Guayaquil, Ecuador, tras recorrer Brasil, Paraguay, Uruguay, Argentina, Chile, Bolivia y Perú, nos enteramos de la trágica noticia del fallecimiento de su amigo, el suizo Thomas Gerdil (ver fotos), un experto en supervivencia que además era biólogo y había recorrido un tramo de la Patagonia junto a Sebastián. Según contó, Thomas sufrió un accidente de montaña en Suiza. Así que por este motivo, Sebastián desea que este relato sea en su homenaje.
El viaje de Sebastián comenzó en una combi que luego vendió para continuar su viaje a dedo, en colectivos y hasta en embarcaciones.
Sebastián, ¿dónde andás?
En Guayaquil (Ecuador).
¿Con quién estás?
Con Carolina (mi novia), nos conocimos en Chile durante el terremoto.
¿Están haciendo algún laburo a la gorra, en la calle?
Los dos estamos trabajando de estatuas vivientes. Yo, de Jack Sparrow y ella de Avatar. En Bolivia nos fue muy bien, la gente nos aclamaba y peleaba a los policías pesados que querían sacarnos. Fue una gran y bonita experiencia, en Bolivia el arte está muy bien visto y respetado.
En Perú, otra imagen. No pudimos hacer el trabajo en casi ningún lado. O nos corrían o nos amenazaban. Hay realmente un problema con el arte en Perú, y eso no solamente pasa con los extranjeros sino con los mismos peruanos.
Mapa de ruta
Este tramo del viaje fue así: subí de Córdoba a Salta, donde encontré a Carolina, y de ahí arrancamos por el norte argentino hacia Bolivia. En la frontera boliviana el policía del lado Bolivia le dijo a Carolina:
- ¿Usted de dónde es?
- Carolina: De Chile
- (Dándole un golpecito a la espalda) ¡Ojalá que te mueras!
Y esa fue unas de las varias veces que fueron racistas y de mal gusto con Carolina por ser chilena.
Después pasamos por el salar de Uyuni, a no perderse ese viaje, es fenomenal. Y llegamos a Chile. De ahí regresamos a Salta (tuve que recuperar mi cámara que estaba en reparación). Subimos hasta la frontera con Bolivia y esta vez la atravesamos de noche. Ahí quisieron extorsionarnos, pero gracias a mi experiencia me enojé y los mandé a bailar, y pasamos sin problema.
En La Paz encontré a mi amigo suizo, con quien hicimos estatua a la gorra. Carolina, de Avatar; Vladimir y yo, de Davy Jones y Jack Sparrow, interpretando la segunda película de Piratas de Caribe. En los días posteriores trabajamos en Sucre, Vallegrande y en la Higuera (donde murió el Che Guevara), a cambio de hospedaje. Hicimos un espectáculo para la escuelita.
Realizamos visitas al lago Titicaca, Tihuanaco, festejamos la fiesta del Gran Poder (fiesta más grande de Bolivia) y rumbo al norte, donde viajamos en camión hasta Rurrenabaque, hicimos un espectáculo para un colegio entero. Fue entretenido hacer ese show adelante de 600 personas. Desde allí partimos rumbo a Cobija, frontera con Brasil, porque pasar directo a Bolivia es muy peligroso por el contrabando. De Brasil a Perú hicimos una primera parada en Puerto Maldonado (lo único que puedo decir: fea ciudad). De ahí nos fuimos en auto y en barco hacia la reserva Manu. Fue una aventura digna de Indiana Jones. Parecía que volvíamos al tiempo de la búsqueda del oro. Nos quedamos en Boca Manu con el señor Don Manuel, con quien filmé. Lo horrible de esa aventura fueron los mosquitos.
Por fin en Cusco, nos adoptó una familia. Les hice la decoración del hospedaje y bauticé con el nombre: AGARTHA (capital del centro de la Tierra). Ahí llegó mi amigo Germán Prochetto con quien había viajado en la Patagonia y fuimos a ver el templo de Choquequirao y de Machu Picchu. No hay palabras para esos monumentos... son majestuosos y aún les queda un poco de magia después de tanto turismo. En Perú todo es plata y turismo, no se siente la libertad. Además, si sos turista te matan con el precio. Existe un cierto racismo, porque si un peruano vendría a Suiza o a Argentina no se le haría el precio doble por la cara.
En la municipalidad de Cusco fuimos a pedir una autorización para trabajar de estatua y el director casi insultó a Carolina por ser chilena. Imaginen que ni insistimos en trabajar en Cusco... y en las otras ciudades como Puno o Arequipa, igual. Sólo en Nazca pudimos prestar nuestra actuación a la gente y compartirles así un poco de nuestro arte. En Lima nos recibieron dos amigos que conocimos en el camino (Miguel y Marcos). Con el abuelo (Carlos) comencé a filmar mi primer largometraje... pero todavía queda en secreto. Iré informando más sobre este proyecto.
De Lima a Mancora, nos quedamos pocos días, porque no nos permitieron quedarnos más. No pudimos reclamar los tres meses que normalmente se le ofrece a un turista. Pensaba ir a ver un amigo en Trujillo pero las noticias anunciaron que hay rabia bubónica, así que pasamos de largo. Llegamos anoche a Guayaquil... es impresionante, muy grande, me recuerda al gran Buenos Aires.
¿Viajan a dedo, cómo se están manejando?
A dedo cuando da, sino en bus (los pasajes son muy baratos), a veces en camiones por la jungla y también en barcos que quedan bloqueados en el medio del río, y hay que sacarse los pantalones y empujar el bote hasta que pueda flotar.
¿Cómo sigue el viaje?
Atravesaré Ecuador, iré sobre las islas Galápagos en honor a mi amigo Thomas Gerdil, quien soñaba poder ir. De ahí rumbo a Colombia y a América Central. Con la estatua trato de retardar mi regreso a Europa, regreso que me incomodaba por el estilo de vida pero que hoy veo más y más cerca y con ganas, para poder compartir y relatar mi aventura y mis encuentros.
Terremoto en Chile
Pacha Mama
Más información: http://www.sebi-che.com/blog/
|
|